Hoy se destruirían 15.000 docenas de huevos en la avícola Santa Ana, porque ya no tienen espacio de acopio. La firma, que permanece en vilo en medio de la judicialización por los resultados emitidos por el Senasa que indican casos positivos de gripe aviar en el establecimiento, recibió la orden de paralizar todas sus operaciones.
Mientras los empleados –preocupados por la fuente laboral de los más de 150 trabajadores– permanecieron de vigilia en la planta, sin poder realizar ningún envío ni tarea, los galpones se llenan de material de acopio que no se puede comercializar y la región empezaría a sentir en la jornada de hoy las consecuencias de la falta de abastecimiento.
A la espera de la resolución del juez federal Juan Carlos Vallejos respecto de la medida cautelar interpuesta por la empresa, que requiere repetir las pruebas de testeo, la jornada de ayer fue angustiante y cargada de incertidumbre. Y, en la misma medida, de polémica.
Video viral
“Interpusimos una acción de amparo a fin de demostrar nuestro derecho, acreditando la urgencia. Esto se tendría que resolver hoy o mañana [por hoy], porque se pidió un informe al Senasa. Y, por supuesto, se presentaron las pruebas que acreditan que las muestras no se extrajeron, y que en consecuencia toda el accionar viola un montón de derechos”, expresó ayer el abogado Armando Aquino Britos.
Cerca del mediodía, un video que dejaría ver el momento en que técnicos del organismo sanitario nacional entregaron los kits de pruebas –sin ingresar al establecimiento– se difundió de manera viral en redes sociales. “El veterinario nunca se bajó de la camioneta. El dueño de la firma estaba por realizar el testeo como un procedimiento rutinario, pero debió retirarse por un problema de salud y dejó el material sin utilizar en su escritorio. En medio de la confusión, la veterinaria de la empresa lo encontró y se lo entregó al Senasa sin haber practicado el muestreo. Es imposible que den positivos resultados de un análisis que no se realizó”, enfatizó el letrado. Del mismo modo, aseguró que los propietarios de la empresa están dispuestos al sacrificio de las aves, si es que un segundo testeo realizado “con los protocolos correctos” llegara a arrojar resultados positivos a la enfermedad.
“Ellos [por el Senasa] no quieren hacer un nuevo estudio porque saben que todo es trucho y que cometieron delitos”, opinó Aquino Britos.
Bioseguridad
Por su parte, Pedro Méndez, director regional del Senasa, ratificó los resultados positivos de los testeos. “No tenemos duda de que los casos son positivos, aunque aún no presenten síntomas”, dijo en referencia a las aves. “Nos hemos presentado también en la Justicia solicitando que se cumplan los protocolos preventivos, porque de otro modo la enfermedad se podría diseminar”, subrayó. “Las aves se van a enfermar, se van a morir y la pérdida económica no se va a poder evitar, pero con el altísimo riesgo de diseminación de la enfermedad”, advirtió.
Contraprueba
Con habilitación para expedirse respecto de la medida cautelar aún en horarios y días inhábiles –una medida considerada por tratarse de un tema que afecta a la sanidad–, el juez federal Juan Carlos Vallejos preparaba, al cierre de esta edición, una resolución tras haberse presentado los informes requeridos por parte del Senasa. Pero, mientras trascurría la espera, todavía se aguardaban “las buenas noticias”, dijo a este medio un portavoz de los trabajadores, que sostienen turnos de guardia en el lugar.
“El Senasa habría accedido a realizar la segunda prueba. No sabemos si fue un requerimiento de la Justicia o una decisión política. Al parecer, el tema habría llegado hasta la Casa Rosada y la orden viene de arriba”, deslizó el trabajador. Así, sin la confirmación oficial, aún no llegaba ni el alivio ni el festejo.
República de Corrientes
