Por la escasez, crece la venta de cubiertas usadas y se dispara el comercio ilegal.

Un fuerte conflicto sindical vino a agravar una situación que en realidad ya era compleja desde antes por las trabas a las importaciones y hoy el sector de los neumáticos y la industria automotriz viven una crisis sin precedentes al menos en los últimos años. Escasez de productos, cierres de plantas, sobreprecios y el crecimiento del mercado ilegal forman parte de un escenario que hoy preocupa no solo a las empresas sino también a los usuarios, que ven cada vez más lejana la posibilidad de cambiar los neumáticos. Siendo además un componente clave para el funcionamiento del vehículo y en la seguridad vial, la problemática parece hoy estar más cerca de agravarse que de mejorar.

La situación llegó a tal extremo que muchos representantes oficiales de las marcas decidieron suspender las ventas, incluso en Corrientes. Los de Bridgestone y Firestone señalaron al respecto que “no podemos vender si no van a reponer la mercadería”.

La idea es suspender la comercialización por al menos unos días, hasta que el panorama nacional esté un poco más claro y el conflicto sindical se pueda resolver; algo que hasta el momento parece lejano ya que no hubo respuestas a los reclamos de los trabajadores y la relación con la patronal se encuentra ya en un punto crítico.

“La verdad es que, para nosotros, es muy preocupante. Los precios que teníamos eran elevadísimos, pero la gente compraba”, dijeron desde una empresa con sede en la ciudad de Corrientes. Señalaron además que desde hace al menos seis meses vienen con problemas de escasez, pero que la situación podría sobrellevarse porque faltaban algunos modelos no tan requeridos; pero ahora incluso los más populares cuestan conseguir”.

Mientras continúa la huelga y los bloqueos sindicales, las tres empresas decidieron paralizar su producción: Bridgestone, Pirelli y Fate, mientras las plantas de Ford Argentina y Toyota también pararon por falta de insumos, algo que podría generar demoras en las entregas de vehículos en el corto y mediano plazo.

En tanto, desde una de las casas del rubro más importantes de la ciudad señalaron que las primeras complicaciones aparecieron con la reducción de importaciones, la faltante de insumos y ahora se sumó el conflicto en las plantas de producción.

“La reducción de los abastecimientos se ve en un 50 %. No podemos atender como queremos a muchos clientes”, reconocieron. Ante la escasez, lo que hacen es agendar los pedidos y a medida que van llegando los neumáticos se hacen las entregas, pero con ciertas demoras. Ahora, con la crisis agravada, creen que los plazos podrían extenderse aún más.

Mercado paralelo

Los altos costos de las cubiertas de mayor calidad y ahora la escasez hicieron que se disparara la venta de productos que hasta no hace mucho no resultaban tan atractivos para los conductores. En este contexto, comenzaron a proliferar las terceras marcas, en su mayoría de origen chino, que llegan desde Paraguay en forma ilegal.

Este tipo de neumáticos fueron ganando terreno de manera inusitada en el último tiempo en el país, y más aún en Corrientes por la cercanía con el país y vecino y la posibilidad de conseguir un producto a bajo costo a través de revendedores, o bien apelando a la alternativa de cruzar y comprar sobre todo en Encarnación, la opción más a mano.

Es que los valores son por demás llamativos, con una brecha respecto a los precios argentinos que en la mayoría de los casos es de alrededor del 50 %. Es decir, por el mismo dinero que en la Argentina se compran dos cubiertas, en Paraguay alcanza para cambiar las cuatro. Las marcas están lejos de ser las más reconocidas y las que más se ven en este mercado paralelo son Neupar, Xbri y Sunset.

Entre las medidas de mayor demanda aparecen las de rodado 14, que son las que utilizan los automóviles de gama media-baja que más se ven en las calles. Estos modelos en el vecino país pueden conseguirse a $ 20.000, mientras que aquí se pagan más de $ 40.000 e incluso bastante más, dependiendo de la marca y las prestaciones que ofrece.

En la Argentina, una cubierta para camioneta de primera marca puede superar incluso los $100.000, por lo que la inversión para un recambio completo como se aconseja puede rondar el medio millón de pesos.

Usados

La escasez y los altos costos que tienen las cubiertas de origen nacional o de primeras marca hicieron crecer también el mercado de los neumáticos usados. En las redes sociales y diferentes plataformas de compraventa proliferan los avisos, aunque en estos casos también sus precios se incrementaron notablemente de la mano de las nuevas. Las opciones son innumerables, aunque especialistas advierten sobre los riesgos que puede haber al utilizar neumáticos con desgaste, aunque la apariencia sea aceptable.

A la hora de comprar de una cubierta usada, aseguran que es imprescindible tener en cuenta corroborar el dibujo y las posibles fallas por deformaciones que son habituales y pueden provocar daños posteriores en el tren delantero del vehículo.

Límites y complicaciones

El escaso stock hizo que en algunas plataformas como Mercado Libre muchas casas pusieran topes de compra. “Puedes comprar solo dos unidades”, dice el mensaje que aparece en varias de las publicaciones de neumáticos nuevos.

La preocupación no es solo a corto plazo, sino también pensando en fin de año.

Habitualmente, entre noviembre y diciembre, muchos deciden cambiar las cubiertas antes de irse de vacaciones en sus vehículos, además de ser un requisito fundamental que estén en buen estado para poder cumplir con la revisión técnica obligatoria.

Analizan abrir exportaciones

El Ministerio de Economía pidió a las empresas que accedan a sentarse nuevamente a la mesa con el sindicato para destrabar el conflicto del sector de los neumáticos. El Gobierno nacional analiza una medida de emergencia en caso de que el problema persista y que en la próxima reunión no haya un acuerdo.

La alternativa es liberar las importaciones, según dijo el secretario de Industria, José Ignacio de Mendiguren.

La liberación sería en el caso de que fracasen las negociaciones, aunque desde la Nación señalaron que la expectativa del Gobierno es que se logre un acuerdo y pueda normalizarse la producción tanto de cubiertas como de vehículos.