Centenares de vecinos se dierón cita, en la Capilla San Isidro Labrador, para despedir al padre Carlos Cordoba a su nuevo destino pastoral.
En la misa presidida por el obispo monseñor Adolfo Canecín, este Miércoles, dando 
la bienvenida al presbítero Rodrigo Velez. Y posterior despedida al padre Carlos Cordoba; desde el propio intendente municipal, concejales, vecinos de todas las comunidades, se acercarón a agradecer al sacerdote quien por siete años fue guia, escucha y apoyo de la comunidad catolica y de quien en alguna ocasión necesito de él.
Recuerdos de su paso y buen pastor, servicial y humano destacaban desde los diferentes grupos de las capillas que el frecuentaba como cura.
Desde los distintos grupos y familias hicierón llegar sus deseos de bendiciones en su nueva tarea eucarística que se le fue encomendada y bienvenida al nuevo parroco.
